Sobre o Diário de Raúl Ruiz."Yo suelo leer diarios, libros de conversaciones y correspondencias; me interesa ese género de escritura, la escritura íntima, y te diría que este diario me parece extraordinario, sobre todo si uno lo compara con otros “diarios de artistas”. Uno de sus rasgos más notables, pensando específicamente en ese género, es que Ruiz no registra solamente sus ideas u ocurrencias artísticas, sino también, y con el mismo énfasis, la rutina cotidiana en que tienen lugar. Yo siempre tuve presente que si seleccionaba solamente los hechos o las ideas mayúsculas del diario, el resultado sería el registro de un tipo que se pasa de epifanía en epifanía, que tiene puras ideas geniales o le pasan puras cosas increíbles, cuando en verdad la vida no funciona nunca de ese modo, y Ruiz lo tenía claro. Por eso, me encanta cuando está reflexionando sobre Whitehead y acto seguido anota que para la cena piensa preparar choritos al vapor o que el día estaba feo."
"Yo suelo leer diarios, libros de conversaciones y correspondencias; me interesa ese género de escritura, la escritura íntima, y te diría que este diario me parece extraordinario, sobre todo si uno lo compara con otros “diarios de artistas”. Uno de sus rasgos más notables, pensando específicamente en ese género, es que Ruiz no registra solamente sus ideas u ocurrencias artísticas, sino también, y con el mismo énfasis, la rutina cotidiana en que tienen lugar. Yo siempre tuve presente que si seleccionaba solamente los hechos o las ideas mayúsculas del diario, el resultado sería el registro de un tipo que se pasa de epifanía en epifanía, que tiene puras ideas geniales o le pasan puras cosas increíbles, cuando en verdad la vida no funciona nunca de ese modo, y Ruiz lo tenía claro. Por eso, me encanta cuando está reflexionando sobre Whitehead y acto seguido anota que para la cena piensa preparar choritos al vapor o que el día estaba feo."